En una generación donde nos enseñas sobre el cambio climático y lo importante que es hace consciencia sobre el daño que le hacemos al planeta Tierra, las luces navideñas son una total contradicción.
Parecerá absurdo o exagerado pero en realidad es bastante lógico. Si algo defina la época de Navidad, son las decoraciones brillantes y las luces que adorna las calles. Lo sorprendente es que aunque para Estados Unidos pareciera un detalle mínimo, la cantidad de energía que se gasta en luces, es más que lo que usan algunas naciones en desarrollo durante todo un año.
Esta es una marca de la desigualdad que existe entre países aún en pleno siglo XXI. En América, las decoraciones llegan a utilizar 6.6 millones de kilovatios, lo equivalente al funcionamiento de 14 millones de refrigeradores. Probablemente después de esta cifra quieras optar por una navideña con adornos más "vintage" o amigables con el ambiente.
Via Huffington Post
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