Washington, 31 ago (EFE).- La federación sindical AFL-CIO, tradicional aliada de los demócratas, anunció hoy una movilización de votantes para exigir al presidente Barack Obama medidas audaces para la creación de empleos, de cara a los comicios de 2012.
"La gente trabajadora tiene una poderosa voz cuando se une y, ahora más que nunca, la clase trabajadora necesita que se escuche su voz a nivel político", dijo en conferencia de prensa el presidente de AFL-CIO, Richard Trumka.
"Este es un momento para la audacia, en el que los trabajadores juzgarán al presidente Barack Obama por las políticas que proponga" y en la escala que el país necesita para aliviar la crisis de empleos, afirmó el líder sindical.
Como parte de la movilización, Trumka explicó que la AFL-CIO, que agrupa a 52 sindicatos y tiene 12,2 millones de miembros, ha creado el llamado "Super Pac" que recabará donaciones para candidatos que respalden la agenda de los gremios en el ciclo electoral de 2012 y luchará contra medidas estatales que busquen suprimir o debilitar los derechos sindicales en el país.
Trumka también delineó un plan de seis puntos dirigido a los políticos y que, a su juicio, ayudarán a rescatar a la clase media y trabajadora de la crisis económica actual.
El plan pide más inversiones en la infraestructura, la revitalización del sector manufacturero, la creación de empleos, ayudas a gobiernos locales y estatales para evitar despidos y recortes de servicios, la extensión de beneficios de desempleo y "la reforma de Wall Street" para que las empresas puedan generar trabajos.
Preguntado sobre si la crisis del déficit afectará las demandas de la AFL-CIO, Trumka declaró: "Estados Unidos no tiene una crisis de deuda a corto plazo, tiene una crisis de empleos a corto plazo" y la "mejor inversión" en el país será la creación de empleos.
Rodeado de trabajadores de estados afectados por la crisis, Trumka afirmó que los trabajadores juzgarán a sus líderes "según las soluciones que propongan para responder a la crisis de empleos que los estadounidenses necesitan".
"En el país de la abundancia, uno de cada cinco niños vive en la pobreza, y esa tasa es tres veces mayor en las comunidades negra e hispana", señaló Trumka, que describió la agenda de su grupo como "ambiciosa y esencial".
Trumka sostuvo un encuentro hoy con funcionarios en la Casa Blanca "y coincidimos que hay que invertir más en infraestructura".
Al insistir en que "está en juego el rumbo futuro de nuestro país", Trumka recordó que, según un informe reciente de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), la tasa de desempleo en EEUU -ahora en 9,1 por ciento-, se mantendrá por encima del ocho por ciento hasta 2014.
La mexicoamericana Leann Bosquez secundó a Trumka al subrayar que "la gente en este país sigue luchando" para subsistir y la falta de atención a la crisis de empleo "es inexcusable".
Por otra parte, Trumka repitió la conocida postura de la AFL-CIO de que continuará oponiéndose a los tratados de libre comercio con Corea del Sur, Colombia y Panamá, pendientes ante el Legislativo, por considerar que éstos perjudican a los trabajadores en este país.
La AFL-CIO señaló que, en la actualidad, 25 millones de personas no tienen empleo o están subempleadas y que el desempleo golpea especialmente a los negros e hispanos. Entre los negros, el desempleo es del 16 por ciento, y entre los hispanos es de poco más del 11 por ciento.
Trumka convocó la rueda de prensa en unos momentos en que aumenta la expectativa por el plan de empleos que el mandatario estadounidense presentará ante una sesión conjunta del Congreso el próximo 7 de septiembre.
La AFL-CIO ha sido un tradicional aliado político del Partido Demócrata durante décadas pero su idea de lanzar un "Super Pac" para crear su propia "estructura" de presión política es un balde de agua fría tanto para Obama como para el resto de los candidatos demócratas el próximo año, según analistas.
