Nueva York.- El joven latino Daniel Hernández, convertido en héroe nacional por su crucial ayuda a la congresista Gabrielle Giffords momentos después del tiroteo de Tucson, anunció hoy su apoyo a la iniciativa "Alcaldes contra las armas ilegales".
"En la mañana del 8 de enero las vidas de toda una comunidad cambiaron", afirmó hoy Hernández en un comunicado difundido en Nueva York por los responsables de la iniciativa.
En ese escrito, Hernández explicó que "la gente de Tucson y de toda la nación se vio sacudida por una descarga de balas disparadas por un peligroso y trastornado hombre armado".
"Desde aquel momento", prosiguió el joven de 20 años, "se me ha hecho más evidente que tenemos que hacer más para prevenir ataques similares en el futuro".
El voluntario de origen mexicano, que tan solo llevaba cinco días trabajando para la congresista Gabrielle Giffords cuando se produjo el ataque, fue calificado como un "héroe nacional" por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por su crucial ayuda a la demócrata minutos después de haber recibido un disparo en la cabeza.
Hernández presionó la herida de la congresista para que no se desangrara y la sentó correctamente para evitar que se asfixiara con su propia sangre, por lo que muchos afirman que si su reacción no hubiera sido tan rápida la congresista no habría podido sobrevivir hasta que llegó la ambulancia.
La masacre, perpetrada por el joven de 22 años Jared Lee Loughner, que el pasado 8 de enero acabó con la vida de seis personas y dejó heridas a otras catorce, hizo que unos 550 alcaldes estadounidenses se unieran en contra de las armas ilegales y pidieran al Congreso que se tomen más medidas para evitar que personas desequilibradas puedan hacerse con un arma en este país.
En su respaldo a la iniciativa, Hernández afirmó que espera que el presidente y el Congreso de su país "trabajen juntos lo más pronto posible para reformar" los "archivos en la compra de armas para asegurar que incluyen a todas las personas peligrosas".
Hace apenas un día esta iniciativa recibió otras dos importantes adhesiones: Martin Luther King III y Kathleen Kennedy, respectivos hijos del histórico activista Martin Luther King y del senador demócrata Robert Kennedy, quienes fueron asesinados en 1968.
Además, este proyecto, que quiere fortalecer la ley aprobada después de esos dos históricos asesinatos y por la que una persona no puede poseer un arma si supone un peligro para sí mismo o los demás, recibió hoy otros destacados apoyos desde el ámbito político y cultural.
Yoko Ono, viuda del ex Beatle John Lennon, asesinado a las puertas de su casa en Nueva York hace ya 30 años, ha decidido respaldar esta iniciativa, que calificó de "inteligente" y de la que aseguró que "salvará muchas vidas".
El proyecto, liderado por el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, también fue apoyado hoy por el famoso reverendo Jesse Jackson, el ex candidato presidencial John Kerry, así como numerosos políticos de Arizona.