Denver, 3 ago (EFE).- Gracias a la presión de grupos proinmigrantes la oficina postal de Gypsum, una pequeña localidad en las montañas de Colorado, restablecerá el servicio de casillas de correos a hispanos, que interrumpió al no aceptar sus documentos.
Según confirmó hoy a Efe el abogado Mark Silverstein, de la filial local de la Unión Americana de Derechos Civiles (ACLU), la decisión significará cambios para todas las oficinas postales en Colorado y Wyoming.
Según el abogado, la oficina postal de Gypsum "arbitrariamente y sin justificación" negó el derecho de los inmigrantes latinos del área a obtener una casilla de correo, un elemento necesario en la zona ya que en Gypsum no se reparten las cartas en las casas sino que los residentes deben ir a buscarlas en sus casillas.
"Nos complace que la oficina postal de Gypsum haya acordado terminar inmediatamente con esta inaceptable discriminación basada en la nacionalidad", dijo Silverstein.
El caso comenzó en enero pasado cuando la mexicana Griselda Duarte fue al correo de Gypsum y pidió abrir una casilla de correo. Para comprobar su identidad, Duarte presentó su pasaporte mexicano con una visa B1/B2 emitida por el gobierno de Estados Unidos, y con sus documentos de identidad mexicanos con fotos.
Su pedido fue rechazado porque se consideró que esos documentos eran insuficientes para comprobar la identidad de Duarte. La inmigrante entonces acudió al Movimiento Hispano del Condado Eagle, miembro de la Coalición de Colorado por los Derechos de los Inmigrantes (CIRC), que a su vez pidió la ayuda de ACLU.
Enterado del caso, Silverstein, director de asuntos legales de ACLU en Colorado, aceptó representar a Duarte.
"Claramente, Duarte tenía la documentación apropiada para tener acceso a su casilla de correo. Como cualquier otro residente en Gypsum, ella tiene el derecho garantizado por la Primera Enmienda (de la Constitución estadounidense) de recibir correspondencia escrita por correo sin importar su nacionalidad", comentó el abogado.
Silverstein informó que en abril pasado ACLU envió una carta a la oficina postal en Gypsum pidiendo que se enviase una lista de los documentos de identidad necesarios para obtener una casilla postal y que nunca recibió respuesta.
Tras fallidas negociaciones a nivel local, regional y nacional, la semana pasada ACLU envió una segunda carta al correo de Gypsum, pero en este caso exhortando a la oficina postal a "terminar con la discriminación contra los residentes latinos de Gypsum" en un plazo de 10 días o enfrentar una demanda.
Aunque el Servicio Postal de Estados Unidos (USPS) no realizó declaraciones públicas al respecto, tanto la ACLU como CIRC confirmaron que la oficina de correos de Gypsum ahora nuevamente acepta documentos de identidad emitidos por un gobierno extranjero, incluyendo pasaportes extranjeros y tarjetas consulares y registros electorales mexicanos.
Silverstein indicó que el caso de Duarte no fue el único, sino que existieron "numerosos casos similares". Sin embargo, dijo, ninguna de las otras personas afectadas presentó una denuncia formal como lo hizo Duarte.
El caso es importante, explicó el abogado, porque la situación podría haberse repetido en otras localidades rurales o montañosas de Colorado, y porque el condado Eagle, en donde está Gypsum, es una de las áreas de Colorado con un alto porcentaje de hispanos.
Según datos del censo, el 30,1 por ciento de los 52.000 residentes en el condado Eagle son hispanos. De ellos, un 66 por ciento son inmigrantes. La misma fuente revela que en Gypsum viven 5.100 personas, con un 42 por ciento de hispanos.
Alan Kaplan, portavoz de CIRC, dijo que Duarte le dedicó "ocho meses de esfuerzos a documentar la discriminación en la oficina postal de Gypsum y a detener esas prácticas discriminatorias".
Como resultado de esas gestiones, dijo Kaplan, USPS proveerá capacitación a su personal en Gypsum para prepararlo para aceptar documentos de identidad extranjeros.