Primero que nada, es un estilo de vida que pretende ser más sano y con tanta oferta de cocina vegana y vegetariana en Tijuana, debo aceptar que hoy es más fácil de lo que fue intentarlo 2 años atrás, y a pesar de que llevo poco sin comer carne, hoy encuentro al menos una o dos opciones vegetarianas en la mayoría de los restaurantes de la ciudad y en food trucks hay todavía más.
Desde Wok Trok con sus Portobello Buns y noodles vegetarianos, La Carmelita con su pellizcadas de champiñón o rajas y tacos de coliflor con mole, o hasta un puesto casero de quesadillas con tinga enteramente de zanahoria, flor de jamaica y huitlacoche, sólo por mencionar algunos lugares cercanos a mi área de trabajo.
Porque eso sí, siendo empleada y estudiante, no tengo tiempo para cocinar. Muchos de ustedes tampoco lo tienen, y eso nos dificulta un poco las cosas.
En mi caso, la falta de tiempo para cocinar me afectó económicamente porque no es lo mismo echar un pedazo de carne al sartén, que preparar algo con soya (que primero debe hidratarse, exprimirse, sazonarse y entonces sí, pensar en cómo lo quieres cocinar). El tiempo de preparación me obligó siempre a comer en restaurantes y a veces comí mal y poco.
Aunque no me malinterpreten, porque no estoy culpando al vegetarianismo. Darme cuenta de lo difícil que es no comer carne en un mundo hecho para los carnívoros, me hizo entender por qué es un estilo de vida, tanto como lo es el veganismo.
Serlo implica vivir un cambio radical en tu toma de decisiones diarias. Escoger dónde comer con más cuidado, decirle que "no" a muchas cosas, aprender a cocinar otra vez casi desde cero y comprender que es necesario sustituir algunos alimentos por otros. Definitivamente el vegetarianismo no es una dieta para bajar de peso y si lo haces sólo con esta intención, es posible que sufras una decepción.
La gran frustración de algunas personas vegetarianas que conozco es la duda de otros que no entienden por qué están "gordos" si son vegetarianos. Bueno, no es fácil de explicar pero tiene que ver desde el metabolismo y la complexión natural de una persona hasta si lleva una vida sedentaria o no, y si consume muchos azúcares o harinas.
Después de todo, puedes dejar la carne y seguir comiendo sopes o tacos dorados de papa y frijol con crema. En otras palabras, ser vegetariano no significa comer sano, a menos que incluyas una variedad de vegetales y frutas en tu dieta diaria.
Con esto dicho, quiero compartir algunas observaciones personales, esperando que otras personas publiquen su propia opinión en la sección de comentarios:
1.- Dejar la carne no es igual a ser vegetariano:
Porque además debes consumir vegetales, si no solamente dejaste la carne.
2.- Ser vegetariano no sirve para adelgazar:
Si lo quieres intentar por esta razón, es mejor ahorrarse la pena. Hay muchos factores que influyen y más que comer o no carne, dependerá del número de calorías que consumas. Sobra decir que los aderezos, galletas y pasteles no tienen carne y aún los puedes comer.
3.- Es mejor no hacerlo si no te vas a comprometer:
Porque gastarás mucho para no cocinar tú, comerás mal y te durará poco el gusto. Además, si sí bajaste de peso, vivirás el rebote cuando vuelvas a comer carne.
4.- Ser vegetariano puede llegar a ser muy costoso:
Los vegetales y frutas son económicos si son de temporada, pero cuando no, estamos en problemas. Además, siendo vegetariano necesitas comer con mayor frecuencia y con tal de variar los platillos para no hartarnos, vamos a necesitar una gran diversidad de ingredientes… A menos que no te importe comer siempre lo mismo.
5.- Pero…
Sí lo haces bien, comerás mejor y definitivamente vivirás más sano.
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Elizabeth.rosales@sandiegored.com
