MÉXICO.- Bajo cargos de enriquecimiento ilícito al desviar recursos federales y estatales, fueron detenidos ayer seis ex-funcionarios del estado de Guerrero, entre los cuales destaca la presencia de Carlos Mateo Aguirre Rivero, hermano del ex-gobernador guerrerense Ángel Heladio Aguirre Rivero, y su primo-hermano Luis Ángel Aguirre Pérez.
Junto a Carlos Aguirre, se inculparon también a cuatro servidores públicos, familiares del subsecretario de Finanzas, Victor Hughes. Siendo Pablo Ignacio Hughes, Mairicio Francisco Hughes, Alejandro Carlos Hughes y Jorge Eduardo Hughes, presuntos cómplices del desfalco evaluado en 287 millones 12 mil 594 pesos.
Todos ellos fueron llevados anoche a un penal de máxima seguridad en Almoloya, Estado de México, según el informe que emitió la Procuraduria General de la República (PGR) sobre el caso de malversación de caudales públicos.
Según el Director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón de Lucio, el monto millonario habría sido extraído del erario público hasta sus cuentas de banco personal, entre el 2012 y 2014. Dinero que el gobierno federal y local, originalmente obtuvo de organismos como la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Banobras, Tesorería de la Federación, Comisión Estatal del Agua, Consejo Estatal de Seguridad Pública y Comisión de Infraestructura Carretera Aeroportuaria del Estado de Guerrero.
Aunque no existe una acusación directa contra el ex-gobernador Ángel Aguirre, cuya renuncia ocurrió en el marco del caso Ayotzinapa, la PGR nota que todos los detenidos cuentan con familiares que "fungen (o fungieron) como representantes legales, apoderados y autorizados" para facilitar el desvío de recursos. Una afirmación que probablemente volverá a posar atención sobre el gobernador perredista involucrado -indirectamente- en la desaparición de los 43 normalistas.
Con información de Excelsior, Jornada y El Universal
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Elizabeth.rosales@sandiegored.com
