Tijuana.- Un empresario local fue secuestrado la mañana de este martes por supuestos agentes ministeriales, sin embargo consiguió ser liberado una hora y media después por militares, luego que rastrearan por el localizador del celular la última llamada que hizo para avisar a su familia que fue plagiado.
El comandante de la Segunda Zona Militar, Gilberto Landeros, dijo en conferencia de prensa que en el operativo de rescate habían detenido a dos personas, además de un arsenal y equipo táctico.
Creían que había más criminales involucrados en este caso y era posible que se tratara de una vieja célula criminal que sirvió a uno de los cárteles de la droga establecidos en la región, señaló.
La víctima habló con los medios de comunicación la tarde de este martes en las instalaciones del Cuartel Morelos. Cubrió su rostro y explicó lo que le había sucedido de espaldas a las cámaras fotográficas y de televisión. Sólo se identificó como un empresario con 25 años de residencia en la ciudad.
Dijo que al filo de las 7:30 de la mañana del 11 de octubre fue interceptado por un convoy de cuatro vehículos que lo detuvieron entre la bajada de la colonia Buena Vista y avenida Tecnológico, en el distrito Otay.
Unos ocho hombres que se identificaron como policías ministeriales, tres de ellos mostraron placas de oficiales, le pidieron que se bajara del automóvil, pero él se negó. Los criminales lo bajaron a la fuerza y le dijeron que el vehículo que conducía lo habían reportado como robado, explicó.
Lo subieron a uno de los supuestos vehículos oficiales y se lo llevaron a una casa de seguridad, donde lo golpearon y amenazaron.
Con una pistola apuntándole en el rostro le dijeron sus captores: "Un empresario más que va a caer en nuestras manos", dijo. Le pidieron que hiciera una llamada a su familia para que les avisara que estaba secuestrado.
Posteriormente le pusieron cinta adhesiva en sus manos, piernas y cabeza. Una de las sentencias que le dijeron iba en el sentido de que si no cooperaba iban a echar su cadáver a los terrenos de La Presa.
El comandante de la Segunda Zona Militar explicó que los familiares tenían localizador de llamadas e inmediatamente avisaron al Cuartel Morelos. Por las coordenadas pudieron dar con la casa de seguridad, ubicada en la calle Lomas de la colonia residencial Lomas de Agua Caliente, en el distrito Centro.
Ahí consiguieron liberar a la víctima, detener a dos personas y asegurar tres armas cortas, cuatro cargadores, 33 cartuchos y diverso equipo táctico, dijo Landeros.
Mediante información derivada en el lugar, agregó, se ubicó un segundo domicilio en la calle Cerritos 11567 del fraccionamiento Villas Lomas, en el distrito Centro, donde aseguraron dos armas largas y 377 cartuchos.
Los detenidos fueron identificados como Francisco Antonio Montelongo, nacido en Tijuana hace 21 años, y Filiberto González, nacido hace 32 años en Nayarit.
"No hubo tiempo de que pidieran rescate, fueron sorprendidos", dijo Landeros.
De acuerdo al testimonio de la víctima, varios amigos, empresarios y familiares habían recibido amenazas de secuestro en los últimos años, incluso algunos sí fueron plagiados.
Él expresó su agradecimiento a los militares porque su infierno no había sido tan largo como el que le habían contado algunos de sus conocidos.
Sólo en los últimos tres días, las autoridades han informado de tres casos de secuestros en Tijuana que involucraban a seis víctimas. Una de ellas, un hombre de 75 años, murió de un ataque cardiaco por el impacto del hecho, de acuerdo a los primeros reportes policiacos que se tenían del caso.
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