SAN DIEGO.- El proyecto de la terminal binacional para el Aeropuerto Internacional de Tijuana, el Abelardo L. Rodríguez, tiene años como sueño, otros cuentos en negociación, pero solo necesita de unos más para ser una realidad ahora con el inicio de el edificio de recepción de pasajeros del lado estadounidense, justo del otro lado de la frontera en la mesa de Otay.
Ayer comenzaron las obras para la estructura necesaria al norte de la frontera, que recibirá a pasajeros que buscan ir o venir desde el aeropuerto de Tijuana sin cruzar por las garitas de San Ysidro o Otay.
Actualmente se construye la infraestructura del lado mexicano y el puente peatonal que conectará el aeropuerto con la nueva terminal binacional en San Diego, que equivalen a 8,825 metros cuadrados (95,000 pies cuadrados) de estacionamiento, área de recepción de equipaje, check-in, aduanas y conexión al puente peatonal binacional que cobrará una cuota para usarse, y solo podrá ser utilizado por pasajeros ya con boleto de ida o regreso en mano.
El año de finalización se estima será en el 2015 y es llevado a cabo por la entidad financiera conocida como Otay-Tijuana Venture LLC, un grupo de inversionistas que incluye mexicanos y estadounidenses, incluyendo el magnate Sam Zell.
Ha habido críticas al proyecto, específicamente de algunos ambientalistas que se preocupan por el tráfico que será generado por la mayor demanda de vuelos, así como preocupaciones por parte de taxistas, hoteleros u otros sectores que actualmente se ven beneficiados de la necesidad de varios viajeros que cruzan a Tijuana solamente para utilizar el aeropuerto. Paralelamente, el otro lado argumenta que a largo plazo, las nuevas rutas que llegarán a la ciudad gracias a la terminal binacional compensará cualesquiera pérdidas a corto plazo.
Vía el San Diego Business Journal
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