Para lograr este objetivo, en el programa participan profesores, bibliotecarios y asesores técnicos de la Secretaría de Educación Pública Municipal (SEPM), quienes trabajan en el aula y en las salas de las bibliotecas para que la estadística del gusto por la lectura aumente, señaló la secretaria de Educación Pública Municipal, Juana Laura Pérez Floriano.

El fomento a la lectura en niños, jóvenes y adultos, es un aspecto que el presidente municipal, Carlos Bustamante Anchondo, ha considerado importante desde el inicio de esta administración, comentó Pérez Floriano.
La funcionaria refirió que son preocupantes las estadísticas presentadas en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara; las cuales indican que entre 2006 y 2012 se registró una disminución del 10 por ciento de lectores. Razón de peso para que en el 20 Ayuntamiento se continúen reforzando las actividades de fomento a la lectura, a fin de hacer de Tijuana una ciudad en la que sus habitantes lean más.
Han sido desarrolladas -por los bibliotecarios- dinámicas que motivan a los usuarios a leer, como "La Hora del Cuento" que se lleva a cabo todos los días; mientras que las escuelas cercanas son invitadas a recorridos guiados que permiten estimular el interés de los alumnos por libros de géneros como la novela, poesía o cuento. En la biblioteca Benito Juárez hay más de 170 audio libros de diferentes temas para préstamo interno; incluso se cuenta con bastante material en Braille, para que personas invidentes tengan la oportunidad de disfrutar de los textos y solicitar préstamo a domicilio.

El gobierno municipal ha desarrollado el programa nacional "Salas de Lectura", por medio del cual operan dos Para libros, en Palacio Municipal y en la Delegación San Antonio de los Buenos, en donde se invita a las personas a leer mientras esperan para realizar algún trámite, y en ocasiones se les obsequian libros. Aunado a estos esfuerzos, se han distribuido en diferentes puntos de la ciudad más de mil separadores con contenidos que invitan a consultar libros y visitar las bibliotecas, concluyó Pérez Floriano.
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