En entrevista con ¨El País¨, Paula aseguró que frente a la crisis económica que España vive desde hace algunos años muchas mujeres han ejercido la prostitución, por ello considera que su curso es algo 'imprescindible' para adentrarse en ese sector.
A pesar de que la prostitución es muchas veces vista como un efecto de la trata de blancas, la presidenta de Aprosex deja claro en primer lugar que su trabajo no tiene absolutamente nada que ver con la actividad que la que realizan las mujeres a las que se obliga a prostituirse: "Eso es trata de seres humanos y debe intervenir rápidamente la policía".
Incluso, David del Castillo, representante de la organización feminista Clara Campoamor, ha defendido el curso impartido por la catalana pues argumenta que se trata de mujeres que se prostituyen por voluntad propia y que no existe tipo alguno de coacción.

Paula, también afirmó que con su curso implica que las alumnas tengan claro que la prostituta no es víctima, pues a pesar de que los hombres pagan, "ellos no mandan". Incluso, comparó el trabajo de una prostituta con el de un médico, un arquitecto o abogado pues al final la sexoservidora es quien decide cómo, cuándo y si acepta el trabajo.
También explicó que éste curso comienza recordando a las alumnas si sirven o no para este trabajo. "Todas llegamos aquí por dinero, pero te tiene que gustar el sexo y tienes que ser capaz de hacerlo con desconocidos" afirmó en la entrevista.
Mañana sábado Paula volverá a aleccionar junto a la psicóloga clínica Cristina Garaizábal, a 25 alumnas para que se conviertan en "putas profesionales". Todo ello en el transcurso de un sólo fin de semana y por 50 euros.
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