El alcalde de Badiraguato, por ejemplo, rechaza la creencia popular sobre la supuesta benevolencia de "El Chapo" y un reportaje publicado en Excelsior asegura que ninguna persona entrevistada ha podido demostrar la generosidad del capo.
Badiraguato es un municipio muy pobre al noreste de Sinaloa pero también es la tierra que vio nacer a Joaquín Guzmán Loera. En Badiraguato, él es admirado y respetado a partir de las historias, falsas o no, que circulan afirmando que ayudó a alguien, a muchos y a nadie en realidad.
La mayoría de quienes lo apoyan afirma que El Chapo es "buena gente", que ayuda a los más pobres con dinero y empleo, que protege a su pueblo y que se encarga de enviar comida a los asilos y medicinas a los enfermos, no obstante ¿Dónde se encuentra toda esa gente beneficiada por el Cártel de Sinaloa?
"Es un mito que han creado, que algún narcotraficante de aquí haya invertido en Badiraguato. Yo no veo un edificio esté produciendo empleo. No veo una obra pública, cancha, techumbre, drenaje, escuela, sistema de agua potable, casa de salud o un hospital que ustedes puedan decir que fue construido con dinero del narcotráfico o con recursos de ellos" declaró el alcalde, Mario Valenzuela.
Lo que las pruebas sí dicen, es que el Cártel de Sinaloa ha sido el causante de miles de asesinatos en México, además de ser el responsable de muchos otros crímenes como el secuestro, la extorsión y los robos violentos. No obstante, al Chapo se le acuña una benevolencia de bandido similar a la de Robin Hood.
Él no roba para darle a los pobres, pero vende droga y una parte de su dinero supuestamente contribuye a reactivar al economía de su pueblo natal… Pero la verdad es que Badiraguato no prospera. Es pobre y siempre lo ha sido, aún con la "ayuda" de El Chapo.
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Elizabeth.rosales@sandiegored.com
