La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó que existen expresiones ofensivas e impertinentes, y al no ser protegidas por la Constitución, cualquier persona, incluidos los periodistas, pueden ser llevados a juicio por daño moral. Las palabras "puñal" o "maricón" que algunas personas utilizan para describir despectivamente a personas homosexuales son consideradas como manifestaciones homófobas y entran en un discurso de odio, las cuales fomentan el rechazo hacia un grupo social, por lo que también son consideradas racistas.
Por primera vez, la Corte analiza los problemas que se encuentran en la libertad de expresión y las manifestaciones de discriminación que esta libertad pueda causar, sobre todo a los homosexuales, al ser México un país machista y en algunas ocasiones intolerante con este grupo social.
Se dijo: "La problemática social de tales discursos radica en que, mediante las expresiones de menosprecio e insulto que contienen, los mismos generan sentimientos sociales de hostilidad contra personas o grupos."
Dejaron en claro que ciertas expresiones pueden conformar un discurso homófibo diciendo: "válidamente pueden ser empleadas en estudios de índole científica o en obras de naturaleza artística, sin que por tal motivo impliquen la actualización de discursos del odio".
Todo comenzó cuando en el 2010 el dueño de un diario llamado "Síntesis", Amando Prida Huerta demandó por daño moral a Enrique Núñez Quiroz del periódico "Intolerancia" ambos de Puebla y Núñez Quiroz se expresó de Prida Huerta, en su columna, como "puñal", y aseveró que solo los "maricones" escriben en su empresa.
Se fueron a juicio, hasta el que el caso llegó a la Corte, después de que Núñez promoviera un amparo negándose a indemnizar a Prida Huerta.
Se quiere evitar que se usen de manera burlesca las expresiones homófobas, hacer entender que la homosexualidad no es una condición de inferioridad ni una opción sexual. Al igual que buscar evitar que se incite, promueve y justifica la intolerancia hacia las personas que tienen preferencias sexuales distintas.
Esta es la primera vez que se trata una problemática de este tipo es la SCJN, grupos de apoyo consideran que esto es un gran paso a la aceptación y tolerancia.
joy.ruvalcaba@sandiegored.com
