San Juan, 18 ago (EFE).- El legislador Héctor Torres del gobernante Partido Nuevo Progresista ha propuesto un proyecto de Ley que pretende establecer un toque de queda para menores de edad en Puerto Rico, con el objetivo de reducir la alarmante cifra de delitos graves que se registran la isla.
Torres señaló hoy a Efe que la próxima semana podría votarse el proyecto de Ley 3275 en la Cámara de Representantes de Puerto Rico, tras recibir el informe positivo de las comisiones de Seguridad Pública y de Asuntos de la Judicatura de ese órgano legislativo.
El representante resaltó que la iniciativa es una manera de responder al creciente número de delitos que protagonizan y también sufren los adolescentes puertorriqueños.
"En lo que va de año más de 10.000 delitos han sido protagonizados o sufridos por menores de 18 años", dijo Torres, quien detalló que en el mismo periodo de 2010 se habían detectado 2.000 casos menos.
Explicó que la idea nació tras mantener una reunión con el anterior jefe de Policía, José Figueroa Sancha, quien le dio información de primera mano sobre el aumento de delitos cometidos por menores.
El proyecto 3275 estipula que entre las 10 de la noche y las 6 de la mañana se establezca un toque de queda en las zonas de alta incidencia criminal, algo que deberá determinar una junta formada por el jefe de la Policía y los secretarios de los Departamentos de Familia y Corrección, entre otros.
Torres dijo que el proyecto de Ley, de ser aprobado, establecerá una multa de 250 dólares para los padres o tutores de los jóvenes encontrados en las calles en esa franja horaria.
En caso de ser reincidentes, la multa se elevará a 1.000 dólares, mientras que una tercera infracción podría significar para los padres perder, incluso, la custodia de sus hijos.
"Tenemos que enviar un mensaje contundente a los padres que no son responsables con sus hijos", indicó el legislador, tras recordar que en un reciente control efectuado en un local nocturno de San Juan se contabilizaron 250 menores de edad en estado de embriaguez.
Sobre dónde se establecería el toque de queda, subrayó que las áreas escogidas serían en las que se registran más delitos de tipo 1 y 2, que incluyen apropiación ilegal, asesinatos y homicidios.
Sobre la particularidad de la iniciativa, apuntó que no es una medida excepcional en territorio estadounidense y que está implantada en el Distrito de Columbia.
Torres, que antes de dar el salto a la política fue agente de la Policía de Puerto Rico, destacó que se trata de alejar a los jóvenes de las drogas, el alcohol y la delincuencia que golpean a la sociedad de la isla caribeña.
Responsables policiales han denunciado en reiteradas ocasiones el incremento en el número de delitos cometidos por menores de edad en Puerto Rico.
La secretaria del Departamento de la Familia, Yanitsia Irizarry Méndez, ha insistió también en la necesidad de llevar a cabo una labor preventiva con las familias para poner fin a un estado de criminalidad que es estilo de vida para miles de hogares de la isla caribeña.
El Departamento que dirige Irizarry Méndez tiene en marcha "Educando familia", programa concebido para combatir la descomposición familiar en que según algunos analistas está inmersa parte de la sociedad puertorriqueña.
La criminalidad que sufre Puerto Rico tiene su origen en el tráfico de drogas y en las luchas por el control de los puntos de venta que se libran en las calles de la isla entre bandas, muchas veces formadas por menores de edad.
En lo que va de año se han cometido en Puerto Rico al menos 720 asesinatos, 99 más que en las mismas fechas del año anterior.