En Brasil, esta marcha comenzó en las playas de Copacabana, Río de Janeiro, sin embargo, la marcha se mezcló con la peregrinación de miles de jóvenes que participaban en la clausura de la Jornada Mundial de la Juventud.
Por parte de la marcha, se encontraban entre 1,500 a 2,000 simpatizantes de esta. Estas personas y peregrinos católicos se comenzaron a enfrentan verbalmente, enfrentamiento que terminó en algo más.
"Estamos aquí porque queremos un Estado laico y que mujeres tengan propiedad sobre sus vidas y sus cuerpos", era uno de los argumentos usado por una manifestante.
El hecho de que algunos los manifestantes llegaron a poner en el suelo, en medio de rondas, crucifijos, rosarios y estatuillas de la virgen como señal de protesta contra la iglesia, mientras el enfrentamiento verbal escalaba, varios de los protestantes rompieron las estatuillas e imágenes católicas para provocar a los peregrinos.
Saulo Rafael, de 24 años, peregrino, criticó el movimiento y comparó: "Son muy oportunistas, pues cuando realizan la Parada Gay, la Iglesia no va a protestar diciendo que están erróneos"
¿A quién le da la razón en esta ocasión?
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