México.- El presidente mexicano, Felipe Calderón, promulgó este viernes, 27 de mayo, la Ley General para la inclusión de las personas con discapacidad, con la que espera combatir la discriminación y abolir el "paternalismo" hacia ciudadanos con discapacidades.
En un acto en la residencia oficial de Los Pinos, Calderón destacó que por primera vez "se eleva a rango de ley la prohibición de tratar de manera discriminatoria" a los discapacitados.
La actuación del Estado deja de ser "asistencialista" para reconocer plenamente los derechos humanos de las personas con discapacidad.
El texto legal pretende reconocer la dignidad humana, "erradicar prejuicios e incomprensión" e igualar oportunidades para este sector.
Todo ello se canalizará a través del Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad, un organismo federal descentralizado de nuevo cuño.
Calderón destacó el esfuerzo tanto de los legisladores como de expertos, familiares de personas con discapacidad y afectados para configurar una ley a la altura "de las más avanzadas del mundo en esta materia".
Uno de los puntos negativos en torno al respeto a las minusvalías provino, no obstante, en fecha reciente del Senado, que en su nueva sede, provista de tecnología punta y exquisitamente decoradas dependencias, no incluyó accesos para discapacitados.
El Gobierno de Calderón se comprometió a que, para el fin de su administración, en diciembre de 2012, "por lo menos el 90 por ciento de todas las instalaciones del Ejecutivo federal" en el país sean "plenamente accesibles" a las personas con discapacidad.
La Primera Encuesta Nacional sobre Discriminación en México, que data de 2005, arrojó el resultado de que el 60 por ciento de los discapacitados se sienten rechazados y cerca del 90 por ciento consideran que tienen menores oportunidades de encontrar empleo.
Cerca de 1.7 millones de los cerca de los 113 millones de habitantes de México son discapacitados, de acuerdo con datos oficiales.