Luego de que la economía Brasileña desacelerara su crecimiento, tanto inversionistas del lugar como internacionales, situaron sus ojos en México, según revela un análisis de la revista Forbes.
En una escala mundial de costos, México se situó por debajo de China, lo cual equivale a una mejor oferta con menor precio para los empresarios.
Además, los analistas estiman que el triunfo de Enrique Peña Nieto y los diputados del PRI apostarán por las reformas estructurales y económicas que incrementarán buenas condiciones para la inversión extranjera. Con ello, durante los próximos diez años, México podría convertirse en la economía más fuerte de Latinoamérica sobrepasando a Brasil.
Otro factor importante es el crecimiento demográfico y el incremento en el sector de la población que trabaja, un buen panorama también para las finanzas internas.
Hace dos años, la inversión extranjera prefería a Brasil, el año pasado fue el turno de Indonesia y ahora México. En los tres casos, gran parte del desarrollo se debe a los países con economías "anfitrionas": China, India y Estados Unidos.
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