El animal se encontraba durmiendo plácidamente en el patio de una residencia, por lo que se dio aviso al personal de rescate 911 de Parques y Vida Silvestre de Nuevo León quienes acudieron al domicilio ubicado en Valle de San Ángel, Sector Español en la colonia Olinalá para capturarlo de manera tranquila.
La PROFEPA emitió un comunicado donde indicaron que el objetivo es reubicar al oso en una zona alta y alejada del parque, que cumpla con las características de su hábitat. “Además, se busca preservar la vida de esta especie en peligro de extinción y evitar cualquier tipo de accidente con la población”.
El mes pasado un grupo de jóvenes se topó con el espécimen durante un recorrido por el parque Chipinque, donde se les acercó de manera amistosa. Una joven que fue tocada por el oso aprovechó para tomarse una “selfie” con él a pesar de la tensa situación. Otros encuentros de habitantes de la zona se dieron con el animal en las siguientes semanas, de manera casual y tranquila.
El oso negro es una especie en peligro de extinción que está protegida por la SEMARNAT. En Nuevo León habita en las zonas boscosas y generalmente sus avistamientos se incrementan en la temporada de verano.
Con información de Radiofórmula
