Donald Trump impone tarifa de 100 mil dólares a visas H-1B: un golpe a la inmigración laboral y a trabajadores extranjeros

Donald Trump impone tarifa de 100 mil dólares a visas H-1B: un golpe a la inmigración laboral y a trabajadores extranjeros

Esta tarifa es una estrategia económica que busca reducir la dependencia de mano de obra extranjera y fomentar la contratación local.

Por Grethell Anguiano Monárrez el septiembre 20, 2025

El presidente Donald Trump firmó el 19 de septiembre de 2025 una proclamación que impone una tarifa de 100 mil dólares a las empresas que soliciten nuevas visas H-1B para trabajadores extranjeros especializados. La medida que entra en vigor el 21 de septiembre, apunta a reducir la inmigración laboral en sectores clave como la tecnología.

¿Cuál es la visa H-1B?

La visa H-1B permite a empleadores estadounidenses contratar temporalmente a trabajadores extranjeros en ocupaciones especializadas que requieren al menos una licenciatura. Cada año fiscal se otorgan hasta 65 mil nuevas visas bajo esta categoría.

Esta tarifa impacta principalmente a las empresas que buscan contratar talento extranjero. No afecta a titulares actuales de visas H-1B ni a quienes renueven o reingreses al país. 

Impacto esperado y otras reacciones

La tarifa de 100 mil dolares ha generado inquietud entre empresas y trabajadores extranjeros. Se espera que muchas compañías de tecnología reduzcan la contratación de talento extranjero debido al costo adicional.

Esto podría afectar especialmente a profesionales mexicanos y de otros países que buscan oportunidades en Estados Unidos.

Según el Economic Times, “las acciones de empresas indias como Infosys y Wipro cayeron hasta un 4% tras el anuncio de la tarifa, indicando preocupaciones sobre el aumento de costos operativos y la competitividad en Estados Unidos“.

Por otra parte, grandes de la tecnología como Amazon, Microsoft y JPMorgan han recomendado a sus empleados con visa H-1B que permanezcan en el país para evitar complicaciones relacionadas con la nueva medida.

Con esta decisión, la política de inmigración laboral en Estados Unidos marca un cambio significativo. Se espera que empresas que dependen de talento internacional ajusten sus estrategias de contratación, mientras que los trabajadores extranjeros deberán considerar cómo esta medida impactará sus oportunidades laborales.

 

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