El ex-oficial de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, Diego Bonillo, fue sentenciado en una corte federal a 15 años de prisión por permitir la entrada al país de vehículos que contenían metanfetamina, heroína y fentanilo por la garita Otay Mesa, en Tijuana.
En su acuerdo de culpabilidad, Bonillo reconoció que trabajó para una organización de narcotráfico con sede en México, aceptando pagos a cambio de usar su posición oficial como oficial para permitir que vehículos cargados de drogas ingresaran a la nación estadounidense desde México sin ser inspeccionados.
Bonillo admitió que como parte de la conspiración permitió la entrada de al menos 75 kilogramos de fentanilo, 11.7 kilogramos de metanfetamina y más de 1 kilogramo de heroína.
Según los documentos de sentencia del gobierno, durante la investigación, los agentes descubrieron que Bonillo utilizaba un segundo teléfono, desconocido para las fuerzas del orden, para transmitir sus asignaciones de carril a los miembros de la organización de narcotráfico para que supieran por qué carril y a qué hora enviar a sus contrabandistas para asegurar su entrada.
Finalmente, los agentes determinaron que el papel de Bonillo en el esquema comenzó en octubre de 2023 y continuó hasta abril de 2024, permitiendo la entrada sin inspección de al menos 15 vehículos a través de la garita tijuanense.
Según los materiales de sentencia, Bonillo utilizó sus ganancias para viajar internacionalmente, comprar regalos de lujo, comprar entradas para el combate de boxeo Canelo versus Munguía, intentar comprar propiedades en México y pasar tiempo en el Hong Kong Gentlemen’s Club en Tijuana, México.
“Esta sentencia responsabiliza a Bonillo por traicionar la confianza pública“, afirmó el fiscal federal Adam Gordon. “Convirtió su placa en un arma para obtener beneficio personal, canalizando narcóticos letales a través de un puerto de entrada y poniendo a las comunidades en riesgo. La corrupción como esta se enfrentará a todo el peso de la ley, y no dudaremos en perseguir y castigar a aquellos que cambian el deber por dinero”.
“Los oficiales corruptos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) traicionan su juramento y ponen en peligro nuestra seguridad nacional”, dijo Joseph V. Cuffari, Ph.D., Inspector General del DHS (Departamento de Seguridad Nacional). “Esta sentencia envía un mensaje claro de que tal traición a la confianza pública no será tolerada“.
“El ex oficial de CBP Diego Bonillo permitió la entrada de cantidades masivas de drogas a los Estados Unidos sin tener en cuenta las mortales consecuencias que esto podría tener en nuestras comunidades”, declaró Mark Dargis, Agente Especial a Cargo de la Oficina de Campo del FBI en San Diego.
“Deshonró la placa y violó su juramento de proteger al pueblo estadounidense. Esta conducta traiciona la confianza del público y es contradictoria con los valores y estándares que se esperan de un oficial de la ley federal. El FBI de San Diego y nuestros socios no tolerarán un comportamiento tan deshonroso. Esta sentencia refleja el compromiso del FBI de responsabilizar a cualquiera que corrompa su función a expensas de la seguridad de nuestros ciudadanos”, destacó el agente.