Todo esto se generó después de que Disney anunciara que lanzará su propio servicio de streaming y que terminaría el contrato actual con Netflix a finales de 2019, ya que espera que su servicio esté operando para ese mismo año, cabe señalar que el contrato entre Netflix y Disney se firmó en 2012, pero entró en vigor apenas el año pasado. Disney espera estrenar su servicio con el lanzamiento de Toy Story 4 y de la secuela de Frozen, lo que le dará mucha fuerza en lo que al mercado familiar respecta.
Con esta planeación temporal, Netflix aún alcanzará a streamear la segunda parte de la nueva trilogía de Star Wars, ya que The Last Jedi será lanzado a final de año, entonces, todavía estará entre el contenido licenciado por Disney, sin embargo, la tercera parte, que llegará a final de 2019, ya no entraría en el plan actual.
Obviamente tener las primeras películas representará un gran beneficio para Netflix, pero contar con la trilogía completa sería lo ideal, especialmente teniendo en cuenta el enorme poder que maneja esa franquicia y la cantidad de fanáticos dispuestos a consumir múltiples veces estos contenidos. De cualquier manera, lo que Netflix necesita si quiere ciementar su posición en el mercado del contenido, es crear más y más contenido original y enfocarse en eso en lugar de sólo servir de repositorio para franquicias famosas.
Nota directa de Qore