Esto sucede porque algunas comidas pueden romper las estructuras de colágeno, responsables de la firmeza y la elasticidad de la piel. Con el paso de los años, todos vivimos una disminución natural en la producción de colágeno.
Puedes comenzar a alimentarte de manera más sana, y no verás los efectos solamente en tu peso o en tu bienestar físico, también en tu rostro.
Dulces y refrescos
Desde pan blanco, pasando por chocolate con leche, hasta ese vaso de bebida cola que tomas todos los días: reduce el consumo de todo lo que tenga grandes cantidades de azúcar.
El exceso de azúcar en el organismo no es metabolizado por el hígado y las moléculas de glucosa sobrantes se unirán a alguna proteína, que en el caso de la piel será el colágeno, lo que dañará su estructura y la elasticidad de la piel, favoreciendo la aparición de arrugas.
Alimentos fritos
Todo lo que haya sido freído en grandes cantidades de aceite exacerbará los procesos inflamatorios de las células de todo el cuerpo, de acuerdo a WebMD. En esto está incluida, por supuesto, la piel: así, esas papas fritas están destruyendo tu preciado colágeno y provocan la aparición de arrugas a temprana edad.
Carnes grasas y procesadas
Las salchichas, el bacon y otros embutidos, en general, contienen altos niveles de grasas saturadas y de nitratos, dos ingredientes que contribuyen a la inflamación en todo el cuerpo, un proceso que culmina en el envejecimiento celular. La clave aquí es optar por carnes rojas magras u otras opciones, como pechuga de pollo.
Alcohol
El último alimento de la lista ni siquiera es un alimento, pero muchas personas lo consumen en exceso. El alcohol es uno de los más grandes responsables del desgaste de la piel y la Inflama, al crear una reacción ante la histamina que deja tu piel rojiza. Estos dos procesos pueden contribuir en gran medida a la aparición de arrugas.
Las buenas noticia es que a cualquier edad, tu piel puede regenerarse y recuperar buena parte de su elasticidad y su brillo natural. Puedes comenzar a cambiar hoy.
Vía VIX
