¡La revocación de visas están a la orden del día! Desde el 20 de enero, se estima que el gobierno de Donald Trump ha revocado más de mil 500 visas de no inmigrante a ciudadanos extranjeros, muchas de ellas ya aprobadas o incluso expedidas. Aunque en la mayoría de los casos el gobierno estadounidense se niega a revelar detalles. Entre ellas, destaca el uso de herramientas de inteligencia artificial para identificar posibles riesgos, lo que ha acelerado y reforzado el proceso de cancelación de visas.
Uno de los focos prioritarios en esta nueva estrategia migratoria ha sido México. La administración del republicano ha puesto especial atención en la cancelación de visas a ciudadanos mexicanos sospechosos de colaborar o brindar apoyo (directo o indirecto) a cárteles del narcotráfico. Esta medida se enmarca en una postura más amplia de presión al gobierno mexicano para intensificar su combate contra el crimen organizado.
Un claro ejemplo es la revocación de visas de trabajo y turismo de la banda mexicana Los Alegres del Barranco. Este hecho ocurrió tras una presentación en Guadalajara y Uruapan, donde la agrupación proyectó imágenes de Nemesio Oseguera Cervantes, conocido como “El Mencho”, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Razones para la revocación de visas
La visa para ingresar a Estados Unidos puede ser revocada por múltiples razones, se dividen en causas legales, de seguridad, migratoria o administrativas. Entre ellas:
- Violación de los términos de la visa: Permanecer más tiempo del autorizado, trabajar sin permiso, cambiar de actividad sin autorización (estudiar con visa de turista)
- Información falsa: Proveer datos falsos en la solicitud, usar documentos adulterados y ocultar antecedentes penales.
- Antecedentes penales: Cometer delitos graves (robo, fraude, violencia, narcotráfico, etc.), ser acusado de actividades criminales, incluso sin condena y tener vínculos con organizaciones delictivas.
- Seguridad nacional: Tener nexos sospechosos con grupos extremistas o redes de espionaje.
- Problemas de salud pública: Tener enfermedades contagiosas de riesgo (como tuberculosis activa)
- Apología del delito: Participar en actos públicos que resalten el crimen organizado (como el caso de Los Alegres del Barranco)
Detectar y revocar
Para identificar a personas foráneas cuyas visas puedan ser susceptibles de una potencial revocación el Departamento de Estado ha implementado una estrategia llamada “Detectar y revocar” que consiste en la utilización de una tecnología de inteligencia artificial para el rastro de perfiles “de riesgo”.
Estados Unidos ha detallado que el objetivo de esto es agilizar la identificación de personas que podrían estar vinculadas a dar apoyo a grupos terroristas.
Universidades de Estados Unidos enfrentan una ola sin precedentes de cancelaciones de visas estudiantiles
Más de 1,800 estudiantes internacionales han visto canceladas sus visas F-1 o revocados sus registros SEVIS en lo que va de 2025, según datos recopilados por Inside Higher Ed y reportados por The PIE News. La cifra, que continúa en aumento, ha encendido las alarmas en el sector educativo ante la falta de transparencia del gobierno federal sobre los motivos detrás de estas acciones.
El origen de esta política se remonta a finales de marzo, cuando el secretario de Estado, Marco Rubio, vinculó públicamente la revocación de visas con una ofensiva contra las protestas pro-palestinas en campus universitarios.
“Les damos una visa para venir a estudiar, no para convertirse en activistas sociales que destruyen nuestras universidades”, declaró Rubio el 27 de marzo. Sin embargo, varias universidades afectadas no han reportado incidentes relacionados con protestas, lo que ha generado preocupaciones sobre la naturaleza arbitraria de los criterios utilizados.
De acuerdo con el Departamento de Estado, las cancelaciones responden a una política de “tolerancia cero” frente a violaciones de leyes estadounidenses o amenazas a la seguridad pública. En declaraciones a The PIE News el 23 de abril, un portavoz aseguró que el proceso sigue en curso y que, por lo tanto, las cifras exactas de revocaciones no serán publicadas.
Organizaciones como NAFSA han denunciado la falta de debido proceso, señalando que en la mayoría de los casos no se ha proporcionado justificación alguna a los estudiantes afectados. Por su parte, Inside Higher Ed advierte que la cifra real podría ser mucho mayor, ya que los datos dependen del reporte voluntario de las universidades, muchas de las cuales, especialmente las privadas, son renuentes a compartir información por preocupaciones legales y de privacidad.
