La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), la Administración de Servicios Generales (GSA), el Departamento de Transporte de California (Caltrans) y la Asociación de Gobiernos de San Diego (SANDAG) firmaron oficialmente los acuerdos que permiten iniciar la construcción del nuevo puerto de entrada Otay Mesa East, un proyecto estratégico para la frontera entre San Diego y Tijuana.
Con una inversión total de 1,300 millones de dólares, este puerto de entrada de última generación busca mejorar la seguridad fronteriza, reducir los tiempos de espera y agilizar el comercio binacional. Como parte clave del plan, Caltrans y SANDAG construirán y donarán la nueva infraestructura al gobierno federal estadounidense mediante el Programa de Aceptación de Donaciones de la GSA y CBP.
Por su parte, la GSA resaltó los beneficios económicos de este modelo colaborativo.
“Este acuerdo reforzará nuestra frontera sur y permitirá un comercio más rápido y seguro», afirmó Amanda Sweeney, comisionada en funciones del Servicio de Edificios Públicos de la GSA en la región de la costa del Pacífico. «La GSA se enorgullece de colaborar con Caltrans, SANDAG y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza en esta innovadora solución para crear un nuevo puerto de entrada a la región de San Diego con un importante ahorro de costes para los contribuyentes estadounidenses”.

La firma de los acuerdos de aceptación de donaciones representa un paso decisivo tras el Acuerdo Federal del Proyecto firmado en enero de 2025, que estableció las condiciones generales entre las partes implicadas.
“Los acuerdos de donación con la GSA y la CBP son un hito importante que representa nuestro compromiso compartido de comenzar la construcción del puerto de entrada Otay Mesa East», dijo la presidenta de SANDAG y alcaldesa de Solana Beach, Lesa Heebner. «SANDAG se enorgullece de formar parte de un esfuerzo binacional basado en la colaboración binacional. Esperamos seguir trabajando con nuestros socios para crear un nuevo y innovador puerto de entrada terrestre que refuerce la seguridad fronteriza, impulse el comercio binacional, impulse el crecimiento económico y reduzca los tiempos de espera a ambos lados de la frontera”
Por su parte, el gobierno estatal indicó que estas instalaciones de última generación tienen el potencial de mejorar significativamente el movimiento legal de mercancías, al tiempo que reducen la congestión y los tiempos de espera para las empresas y los trabajadores en este nuevo puerto de entrada.
Tanto CBP como la GSA están autorizadas a aceptar donaciones de bienes inmuebles, muebles (incluidas donaciones monetarias) y servicios no personales de entidades gubernamentales y del sector privado, los cuales pueden destinarse a construcción, modificaciones, operaciones y mantenimiento de los puertos de entrada.
El nuevo puerto de entrada Otay Mesa East representa un paso decisivo para modernizar la infraestructura fronteriza entre San Diego y Tijuana, fortaleciendo la seguridad, facilitando el comercio binacional y promoviendo el desarrollo económico de la región.