Durante la mañana del 16 de julio, el gobierno de Israel lanzó un ataque aéreo contra instalaciones militares en Damasco, capital de Siria. De acuerdo con el Ministerio de Salud sirio, al menos una persona murió y cerca de veinte resultaron heridas.
El Ministerio de Defensa israelí confirmó la autoría del bombardeo y señaló que el objetivo era proteger a la minoría drusa, una comunidad que, según argumentan, se encuentra en riesgo por enfrentamientos con otros grupos armados sirios. “Las advertencias a Damasco han terminado, ahora vendrán golpes dolorosos”, declaró un alto funcionario israelí, en un mensaje directo al gobierno sirio.
Los ataques se centraron en el cuartel general militar del gobierno sirio y también se reportaron explosiones en zonas cercanas al palacio presidencial, lo que marca una escalada importante en la tensión entre ambos países.
Por su parte, las autoridades sirias calificaron la acción como ilegal y criminal, y advirtieron que representa una violación directa a su soberanía.

¿Quiénes son los drusos de los que habla Israel?
Los drusos son una minoría religiosa y étnica con raíces en el islam ismailí, aunque tienen creencias únicas que los diferencian del islam tradicional. Están presentes principalmente en Siria, Líbano, Israel y Jordania. En Israel, muchos drusos son ciudadanos leales e incluso sirven en las fuerzas armadas, mientras que en Siria, parte de esta comunidad ha estado en el centro de enfrentamientos entre el régimen y grupos insurgentes.
Israel ha expresado en varias ocasiones su intención de proteger a las comunidades drusas en zonas de conflicto, lo que ha generado tensión con el gobierno sirio y otros actores regionales.
Un escenario cada vez más tenso
Este ataque se suma a una serie de incidentes que han intensificado el clima de inestabilidad en la región. En las últimas semanas, Israel ha enfrentado enfrentamientos en la frontera con Líbano, intercambios de fuego con Hamas en Gaza.
Además, continúa el deterioro de las relaciones con Irán. Ambos países se encuentran en una situación de conflicto indirecto, con ataques cibernéticos, bombardeos contra posiciones iraníes. Aunque supuestamente se encuentran en un alto al fuego.